Conoce los famosos que eligieron darle un hogar a animales indefensos

Carolina Cuervo mencionó para la revista que Zeus llegó a su vida sin permiso. Ella había prometido no tener más mascotas, luego de la muerte de un perro que amó profundamente durante 17 años.

Zeus tiene antepasados de lobos y su personalidad es bastante particular. Para la actriz fue difícil, al principio, entender que su mascota tenía un espíritu de cazador: libre y andariego. Pero al mismo tiempo, fue una gran lección para comprender el amor desde la libertad. Es cariñoso, noble y muy educado.

Por otro lado, Daniel Samper y su familia le dieron un hogar a Serafín un perro que nadie quería adoptar por tener una enfermedad hormonal que le causaba alopecia.

El perro había estado durante dos años bajo el cuidado del Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal, y tras once fallidas jornadas de adopción, por fin pudo encontrar una familia que no se molestara por su calvicie.

A su vez, la actriz Chichila Navia, quien vive en las afueras de Bogotá con su esposo, el actor Santiago Alarcón, y sus dos hijos. Cuenta que un día llegó a su casa una perrita que, al parecer, estaba perdida, y Matías, su hijo de 9 años, se enamoró de ella, así que les pidió adoptarla y ellos accedieron. Luego de una semana aparecieron los dueños y el pequeño quedó con el corazón roto. Así que decidieron adoptar.

A Belén la encontraron cachorra y con su primera camada de perros, y no tenía pelo porque le habían echado gasolina. Sin duda, un caso impactante que ayudó a la apertura de la Fundación Patitas Campesinas, en La Calera, Cundinamarca.

Con mucha paciencia y amor, esta familia tuvo que enseñarle varias normas a Belén y acostumbrarla a su nuevo hogar.

A su vez, la actriz Jimena Durán ama el mar. Por eso decidió tener una casa en La Guajira, frente a la playa. Cuando no tiene compromisos en Bogotá se escapa para disfrutar de la tranquilidad y para consentir a sus cinco perros, quienes llegaron a ella en situaciones difíciles y hoy están recuperados y felices.

Además, señala que su esposo, el actor Carlos Manuel Vesga, la ha apoyado incondicionalmente con su iniciativa animalista.

De Igual forma, Álvaro Charry, más conocido como Bako, rescató a Lola hace dos años, y desde ese momento quedó perdido de amor por ella.

Hoy en día, Lola es una perrita feliz, tiene aproximadamente cuatro años, y es la consentida. Es muy amorosa y obediente, por eso Bako afirma que no le ve sentido a comprar una mascota, habiendo tantas en calle en busca de amor.

Gregorio Pernía y su familia tienen una fuerte afinidad con los animales, por eso viven con perros, conejos, vacas y gallinas. Dos de sus perras son adoptadas: Pimienta y Money.

El actor apoya activamente la iniciativa de adoptar y no comprar, pues afirma que hay muchas mascotas en la calle necesitando un hogar.

De igual forma, los hermanos María Elvira y Carlos Andrés Ramírez descubrieron el amor por los gatos gracias a Lolita, una gata recién nacida que María Elvira llevó a la casa. Sus padres no estaban de acuerdo, porque no eran amantes de los felinos, pero aceptaron.

A los dos años falleció y dejó un vacío. Desde entonces, todos en la familia, decidieron rehabilitar gatos en condiciones difíciles y ayudarles a conseguir hogar.

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