Los gatos son animales bastante exigentes con su paladar, siempre quieren experimentar sabores nuevos y no todo les entra por la boca, también por el olfato y el tacto.
Por eso es importante que cada dueño conozca no solo el estado alimenticio en el que se encuentra su mascota, sino la forma de elegir los alimentos para que la comida no se quede servida en un recipiente.
Los bigotes, aunque parezcan un atractivo más del gato, también cumplen una función única en su cuerpo.
¿Cómo saber si está bien alimentado?
Un simple abrazo puede hacer la diferencia. Tocar el gato, sentir la textura de su cuerpo y analizar más allá de su pelo, son vitales para conocer si les sobra o les falta comida.
Luz Stella Gallego, líder veterinaria de Nestlé Purina, explicó a Caracoltv.com cómo hacerlo.
“Un abrazo sobre el vientre ayuda a saber si se está alimentando bien. Si al hacerlo se le sienten mucho las costillas, quiere decir que esta bajito de peso, si al acariciarlo se sienten levemente las costillas y la masa muscular del gato, quiere decir que está en buenas condiciones, pero si al abrazarlo no percibes nada y el abdomen está colgando, es posible que esté con sobrepeso”.
Elegir el alimento correcto
Un gato cuenta con alrededor de 500 papilas gustativas que les permiten detectar diferentes sabores. Por ser tan curiosos, buscan probar cosas nuevas cada día y van definiendo sus preferencias. Ofrécele opciones diferentes hasta que encuentre la que más le gusta.
“Muchos gatos utilizan tres sentidos cuando van a comer, primero el tacto inspeccionando la textura, luego el olor verificando la frescura y finalmente el gusto confirmando el sabor. Es importante que verifiques que el alimento que le ofreces sea completo y balanceado”, agregó Luz Stella.
¿Qué tiene que ver el bigote con la alimentación?
Esos pelos largos tan llamativos en su cara sirven para algo más que para hacerlos ver más bellos.
“Es importante no cortárselos, porque estaríamos mutilando un importante órgano sensorial. El bigote no solo permite identificar sabores, también texturas y les sirven como sensores. Los gatos por naturaleza son cazadores, cuando estamos mostrándoles un ratoncito de peluche o una varita, ellos van a usar sus bigotes para tratar de identificar eso que creen que es una presa y eso les hace más divertido el juego”, concluyó la experta.
El tacto en los felinos es muy desarrollado por medio de sus bigotes, patas, mentón y cejas, con estas partes de su cuerpo podrán experimentar texturas. Existen en el mercado opciones balanceadas que mezclan olores frescos y sabores exquisitos para complacer a los felinos, una de estas opciones son las nuevas recetas de Fancy Feast.
El dato
El olfato está de 50 a 70 veces más desarrollado en los gatos que en los humanos, pues presentan 200 millones de terminales olfativas. Si el olor del alimento es rancio o amargo posiblemente no lo consumirá.
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Por: Carolina Vergara / Periodista
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