Un servicial mono salvaje irrumpió en la casa de Ayu Sarasyani, residente de Borneo Meridional, Indonesia, que había dejado en el patio de su casa algunas prendas sucias en remojo, sin imaginar, que un animal se tomaría el atrevimiento de lavarlas para completar aquella tarea doméstica.
Cuando esta mujer regresó a la zona de lavado, encontró a un primate lavando a mano su ropa y quedó impresionada al ver sus habilidades, pues parecía conocer muy bien el proceso, en repetidas ocasiones refregó las prendas con aguja y jabón para eliminar la suciedad.
Sarasyani admiró la escena desde un lugar apartado, ya que temía ser atacada por el acomedido visitante que había llegado a su vivienda. "Me sorprendió ver que se apoderaba de mi trabajo, pero inmediatamente entré en la casa y miré desde mi ventana", reveló en conversación con el diario Daily Mail.
Finalmente, la mujer tuvo que idear una táctica para recuperar su ropa. Un trozo de pan y un plátano fueron las herramientas que utilizó Sarasyani para distraer al mono, que probablemente estaba perdido, pues según lo relató, es usual que estos animales visiten la zona en manada mientras están en busca de alimento.
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