Algo de lo más valioso durante el recorrido de
Así mismo, son un ejemplo de superación a su corta edad, por lo que no solo tienen la oportunidad de demostrar su talento, sino de brindarnos una lección de vida ante las diversas adversidades que pueden estar enfrentando y la forma como salen adelante.
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Este es el caso de María Alejandra, quien vive en el hogar católico Santa Rosa de Lima, en compañía de su hermana melliza. Ellas se encuentran allí debido a que su madre no puede brindarles muchas posibilidades económicas, sin embargo, todos los fines de semana las visita y está pendiente de ellas, lo cual hace que la pequeña esté orgullosa de ella.
Fue en este lugar donde descubrieron su talento y desde ese entonces ha estado preparándose para deslumbrar a los entrenadores y asegurarse un cupo dentro de alguno de sus equipos, para así mejorar día a día y potencializar su voz.
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La hermana Sor Bernarda es la encargada de enseñarle canto a esta pequeña, quien desde hace un tiempo anhelaba llegar a este Diamante, pues para ella esto es como un sueño hecho realidad.
En el escenario, María Alejandra, con sus 11 años, no puede evitar demostrar todas sus emociones y derramar algunas lágrimas porque no puede creer que por fin haya llegado allí. Además, disfruta de un momento único con estos artistas.
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