Aunque Rubén, de 80 años, hace unos días su hijo, Gerardo Aguirre, comentó que su padre se encontraba muy deprimido pues no podía caminar, motivo por el cual tendrá que recibir terapias para recuperar la movilidad de las piernas.
Recordemos que el pasado 23 de agosto en un hospital al sur de la Ciudad de México, el comediante tuvo que ser internado
por tener las piernas ulceradas, la glucosa muy alta, una fuerte anemia y deshidratación.