La grabación inició muy a las 7:00 a.m. Ya a las 8:00 de la noche, y de un momento a otro, llegó la Policía. Pararon la grabación porque, según la autoridad no tenían el permiso 'Pufa' (Permiso Unificado para Filmaciones).
Francy, junto al director, les decían que si tenían los permisos. Incluso, llegaron a pedirle dinero a la artista para que pudieran continuar sin problema con la grabación. Ella se negó rotundamente y después de una hora, los policías decidieron irse porque los papeles sí estaban en regla, pero lo que hicieron fue imponerle un comparendo pedagógico, según lo estipula el nuevo Código de Policía porque, supuestamente, estaban invadiendo espacio público. Al final, terminaron de grabar el video que ya está al aire.