Claudio no piensa dejar que su plan se acabe por todos los inconvenientes presentados en el camino, así que habla con Magdalena para convencerla de las intenciones de Escobita en matar a Ismael.
Luego decide visitar a Lucila en su casa para contarle que su interés en el caso de Armida es que quede libre para así poder enamorarla y quedarse con ella.