Rodrigo Candamil se graduó como actor profesional en el 2000 y, en ese entonces, estaba próximo a irse de gira por España con un par de obras de teatro junto a sus compañeros de academia.
Por este mismo tiempo se ganó un papel en la obra "Crónica de una muerte anunciada", dirigida por Jorge Alí Triana.
Por tal motivo, la dicha del actor fue enorme cuando supo que por primera vez tendría un trabajo bien remunerado en lo que era su pasión y para lo que había estudiado.
Además, el momento crucial llegó cuando le confirmaron la invitación para representar a Colombia en Casa de las Américas, en España, y luego Barcelona. Rodrigo procuró no abandonar ninguno de los dos proyectos y habló entonces con Jorge Alí para que le permitiera ir y volver.
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