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Una fuente de agua limpia les ayuda a purificar el organismo, elimina toxinas de células, tejidos y órganos, y facilita la digestión, ya que mejora la absorción de nutrientes y la formación del bolo fecal. En general, el agua participa en todas las funciones del organismo debido a que les ayuda a mantener un estado de salud adecuado, lo que les permite desarrollarse de manera satisfactoria en las actividades que llevan a cabo a lo largo del día junto a sus tutores.

Por esta razón, Carlos Cifuentes, médico veterinario y vocero de Pet Food Institute, recomienda siempre ofrecer a nuestras mascotas agua fresca y potable, en un recipiente limpio y aislado de contaminación, y procurar cambiar su agua varias veces al día. Adicionalmente, sugiere estar alerta a posibles signos de alarma por falta de consumo de líquido o deshidratación, tales como el jadeo excesivo, decaimiento, encías secas, pliegue cutáneo lento, ojos hundidos, nariz seca, dolor muscular y articula, entre otros.
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Consulta siempre al médico veterinario si tienes dudas sobre el estado de hidratación de tu mascota o la cantidad de líquido que le debes ofrecer. Recuerda llevarlo a urgencias en caso de que presente cualquier signo de alarma.