Ni la más oscura de las pesadillas que tengas se puede comparar con el peso de todos los errores que has cometido, errores que poco a poco te llevan a un callejón sin salida del que no podrás escapar.
Tus complejos, inseguridades y lamentaciones te han llevado a ser preso de ti mismo, poniéndote en un circulo vicioso en el que te haces daño. Tú protagonizas las historias más aterradoras que tu cabeza puede concebir, el miedo se apodera de ti y todo siempre termina igual.