Hace 15 años la artista se sometió a una cirugía estética para aumentarse el busto, pero con un procedimiento antiguo. Años más tarde, cuando empezó a trabajar como actriz, decidió volver al quirófano para realizarse de nuevo un implante mamario.
Brenda duró muchos años sin notar ninguna anomalía, pero hace unos meses su situación cambió. La actriz empezó a sentir dolores fuertes dolores y al pasar al cirujano descubrió que las prótesis que tenía no eran de buena calidad.
Hanst se puso otras prótesis, las cuales no tendrá que cambiarse nunca más y quiere enviarles un mensaje a todas las mujeres que quieren aumentar el tamaño de su busto: encontrar un centro médico confiable y no escatimar en gastos.