Consciente de las consecuencias que podrían acarrear sus palabras renegando del cine español en una industria tan reivindicativa como la española, el actor Óscar Jaenada se ha apresurado a matizar las declaraciones en las que aseguraba que no tenía "ningún sentido" continuar su carrera en España en una época de "venganza" contra el séptimo arte.
De este modo, el intérprete ha echado mano del altavoz que le proporcionan las redes sociales para dejar bien claro que únicamente pretendía expresar su convicción de que garantizar el buen funcionamiento de escuelas y hospitales resulta más urgente que continuar subvencionando nuevos rodajes de películas.
"Esta es la frase: 'En España ahora mismo no tiene sentido hacer cine, ahora lo que importa es que no cierren más escuelas ni hospitales'", escribió el intérprete en su perfil de Twitter, confiando con ello en calmar un fuego que avivó al denunciar también la "vendetta clara y evidente" que estaría viviendo en España.