El artista llegó al país procedente de Panamá, pero al momento de hacer su registro migratorio, a Manuel Medrano se le bloqueó la máquina encargada de hacer el procedimiento. Al ver esto, el artista pasó por encima de la puerta de vidrio, lo cual es un acto muy grave que ocasiona sanciones. Si él hubiera sido un extranjero, le harían un proceso de investigación y de inmediato, sería deportado a su país de origen.
Según fuentes oficiales de Migración Colombia, Medrano fue muy grosero con los funcionarios, estaba fuera de sí y muy alterado. En medio de los manoteos del artista, se le acercó un funcionario y le devolvió su maleta.
Ellos se vieron obligados a llamar la policía luego de que le trataron de hacer entender que ellos estaban cumpliendo con su trabajo y que el registro migratorio debe hacerlo todo ciudadano que ingrese al país.
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Según Migración Colombia, el artista los recriminó diciendo que él era una figura pública a lo que ellos le respondieron que hasta el presidente de la república realizaba este procedimiento.
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