Los duques de Cambridge, Guillermo y Catalina, han querido tener un detalle con las decenas de seguidores que ya están acampando a las afueras del hospital St Mary's de Londres esperando la inminente llegada del que será su segundo hijo. Así, tras ver imágenes de ellos apostados frente al ala Lido del centro médico, decidieron esta mañana de martes sorprenderles con bebidas calientes y pasteles comprados por sus asistentes en una panadería cercana.
"Vieron que estaban acampados y quisieron enviarles el desayuno. El duque y la duquesa sabían que llevaban ya mucho tiempo esperando en la intemperie y quisieron hacer algo por ellos", reveló una fuente del palacio de Buckingham a la revista People.
Hoy también se ha conocido que Guillermo y Catalina incrementarán la seguridad cuando nazca su segundo hijo, una práctica por otro lado, normal y acorde a lo que el protocolo de seguridad de palacio prevé en estos casos, según cuenta Ken Wharfe, exjefe de seguridad del palacio de Kensington, a Us Weekly:
"Actualmente Guillermo y Catalina tienen un equipo de protección, imagino, de unas seis u ocho personas entre los dos, con la posibilidad de solicitar mayor seguridad si la necesitaran. En ese equipo tienes otras dos personas que serán responsables únicamente de la protección de Jorge. [Cuando llegue el nuevo bebé] esa seguridad se verá incrementada probablemente en unas persona más. No es que Jorge tenga responsabilidades públicas sino que tiene que tener más seguridad por razones obvias, porque saldrá a la calle con sus niñeras".
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