Aunque la relación entre el cantante Miguel Bosé y su padre, el emblemático torero Luis Miguel Dominguín, no estuvo exenta de tensiones durante los años de juventud del intérprete -marcados por el estilo tan transgresor y provocativo con el que irrumpió en el mundo del espectáculo-, el astro del pop ha vuelto a demostrar una vez más que esas desavenencias paterno-filiales nunca llegaron a eclipsar el profundo cariño que se profesaban el uno al otro.
Y es que el incombustible intérprete no dudó ayer martes en rendir homenaje a su afamado progenitor -quien a pesar de su carácter algo tradicional entabló estrechas amistades con personalidades de la talla de Pablo Picasso o Ernest Hemingway- en las redes sociales con motivo del 22 aniversario de la muerte del diestro, una ausencia que sigue estando muy presente en el día a día del músico.
"Donde quiera que estés papá, hoy y después de 22 años de ausencia, te echo de menos, más que nunca", reza la conmovedora publicación que ha compartido Bosé en su cuenta de Instagram, a la que ha añadido una foto de Dominguín vestido con un traje de luces y otra en la que aparece él sentado en una estatua del mítico torero.
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Por otro lado, el intérprete tuvo el pasado domingo un gesto similar con su adorada madre, la actriz Lucía Bosé, al hacer partícipes a todos sus seguidores de la esfera virtual del vínculo inquebrantable que a ella le une y, sobre todo, del papel fundamental que la artista de 87 años sigue jugando en la vida de su aclamado hijo.
"Feliz día de la madre, siempre de tu mano...", escribía el vocalista en la misma plataforma junto a una imagen reciente que les retrata a ambos de espaldas y paseando de la mano: una enternecedora estampa que ya acumula más de 25.000 'me gusta'.
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Por: Bang Showbiz
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