Al igual que el legendario personaje del arqueólogo Indiana Jones o el del aventurero Hans Solo, el actor Harrison Ford es, pese a sus 71 años, un tipo duro que no iba a permitir que un simple tobillo roto le hiciera abandonar el rodaje de la última película de 'La guerra de las galaxias'.
En contra de las firmes instrucciones de su médico para que guarde reposo durante al menos seis semanas, la estrella está decidida a regresar al set de rodaje lo más rápidamente posible para meterse de nuevo en la piel del aventurero espacial. Ni siquiera el desafortunado incidente del pasado viernes, cuando una puerta hidráulica le aplastó contra el suelo fracturándole varios huesos, ha mermado las ganas del actor de reencontrarse con el personaje de Hans Solo y con el antiguo reparto de la saga más famosa de la gran pantalla, que incluirá una vez más a Carrie Fisher y Mark Hamill.
"Obviamente no podrá realizar ninguna de las escenas que exijan un gran esfuerzo físico, y hasta caminar supondrá un problema para él. Pero hay ciertas tomas que pueden reescribirse para adaptarse a su lesión", aseguró una fuente al periódico The Daily Express.
Sin duda, la noticia habrá supuesto un gran alivio para todos los fans de la franquicia intergaláctica, que temían que la ausencia del actor afectase al ya de por sí apretado calendario de rodaje, pese a las insistencias de los portavoces de los estudios de Disney que aseguraban que la grabación continuaría en marcha sin problemas.
"Los primeros dos o tres días fue complicado tener que cambiar los planes, pero ahora estamos seguros de que podemos coordinarlo todo. En esta película en concreto participan muchos actores, así que no es un desastre total. Tenemos esperanzas de poder mantenernos fieles a la agenda original", aseguraba recientemente unos de los portavoces de la compañía en un comunicado.
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