Aunque los arriesgados modelitos que Jennifer Lopez luce sobre la alfombra roja siempre acaparan todos los flashes, en el mundo de la moda no todos ven con buenos ojos su costumbre de enseñar tanta piel como sea posible. Por eso, el diseñador argentino Roberto Piazza se negó a venderle uno de sus vestidos cuando la cantante le pidió que lo modificara para hacerlo más atrevido.
"Ella quería un vestido de color rosa, muy de los años de oro, de gasa transparente. Pero me pidió que le sacáramos el forro para que el diseño fuera todo transparente. Me negué. No quería quedar como ese tipo de diseñador que vende modelos osados. Cuando entras a formar parte de un target quedas encasillado", reveló Roberto en una entrevista a TN Famosos.
Sin embargo, el argentino sí se muestra encantado de que otras cantantes con un estilo más recatado que Jennifer, como por ejemplo Britney Spears, luzcan sus creaciones.
"Britney Spears compró un vestido blanco cortito, un diseño que yo no hago mucho porque es caro y no se vende. Es todo en cristal Swarovski. Debe pesar seis kilos", apuntó.
Publicidad
Pero lo más probable es que a Jennifer no le doliera demasiado quedarse sin el vestido que quería, ya que ella se siente muy orgullosa de haberse mantenido fiel al estilo exagerado y provocativo que le ayudó a convertirse en un icono de su barrio natal, el Bronx.
"Todavía soy muy del Bronx. Sigo llevando pendientes de aro y me sigue encantando ponerme zapatillas de deporte con chándal. Siempre me sentía como si estuviera fuera de lugar en Hollywood, pero también creo que la sabiduría de la calle que adquirí mientras crecía en Nueva York me ha ayudado mucho en este mundo", explicaba la estrella a la revista Complex.
Publicidad
Mira también: Ella es la hermosa mujer a la que confunden con JLo
Por: Bang Showbiz