"Pensé durante mucho tiempo que iba a morir. Mis pensamientos eran muy oscuros. Estaba sentado ahí contemplando el suicidio. No podía andar. Emocionalmente era muy difícil para mí lidiar con ello", cuenta a la revista Rolling Stone.
Morgan (47) consiguió superar la tragedia en la que se vio envuelto, superó el coma, la ceguera temporal, los huesos rotos... necesitó para ello rehabilitación, pero también ayuda psicológica, ya que tuvo que enfrentarse a sentimientos de culpa al conocer la muerte de su amigo James 'Jimmy Mack' McNair en el accidente.
Actualmente Morgan está de regreso en los escenarios y tratando de dejar atrás la dramática experiencia vivida.
"No creo que burlara a la muerte. Creo que este era el plan. Mi habitación no estaba lista", afirma.
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