Sumergidos en el dolor, ella por un mal de amores y él por el rencor del rechazo de Miguel Morales, Kike y Magnolia ahogan sus penas en el licor mientras planean cómo vengarse.
En medio del despecho y el efecto de los tragos, Magnolia le propone que comiencen juntos una nueva vida lejos de Valledupar, y Kike se lleva a su hijo para ‘matar’ de la pena a Evelti.