El pasado 3 de noviembre Kendall Jenner celebró con una fiesta por todo lo alto rodeada de sus amigos y familiares un acontecimiento tan importante como cumplir 21 años, que en Estados Unidos -su país natal- significa que la modelo ha alcanzado la edad legal para beber. Pero, en lugar de seguir la tendencia popular de emborracharse hasta extremos insospechados la primera noche que por fin podía consumir bebidas alcohólicas sin meterse en un lío, Kendall prefirió moderarse y mantener la compostura.
"Creo que lo mejor de todo mi cumpleaños fue, probablemente, que no acabara vomitando en algún momento de la noche, y que a la mañana siguiente solo me despertara con una ligera resaca", confesó la modelo en el programa 'The Late Late Show with James Corden'.
Sin embargo, también cabe la posibilidad de que la joven no se soltara la melena porque ya había probado el alcohol en ocasiones anteriores y, por tanto, no le resultaba tan atractiva la perspectiva de tomarse unas copas de más. O al menos eso daba a entender la respuesta evasiva que dio cuando el presentador le preguntó si fue en esa velada cuando se tomó su primera bebida alcohólica.
"Sí, era la primera vez", bromeó con poca credibilidad. "Sabía muy rara, quemaba, eso no me lo esperaba", añadió.
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Por: Bang Showbiz