Los preparativos de la boda de Lady Gaga y Taylor Kinney están ya en marcha, y lo están en parte gracias a la inestimable ayuda de la madre de Lady Gaga, Cindy, y el resto de mujeres de su familia, quienes no han querido perder la oportunidad de participar en el gran día.
"Creo que si no dejara a mi madre hacer todo esto con nosotros, creo que si hubiera negado a las mujeres de mi vida la posibilidad de planear la boda, probablemente me hubieran matado. ¡Tengo toda la ayuda del mundo!", contó a Ryan Seacrest en iHeartRadio.
Pero a pesar de la expectación, la cantante asegura que su boda con el actor va a ser muy discreta.
"No estamos planeando nada sobre lo que merezca la pena escribir", aseguró.
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Gaga, cuyo nombre real es Stefani Germanotta, y el actor llevan comprometidos desde febrero del año pasado, pero Taylor es consciente de que las raíces italianas de su futura esposa hacen que los preparativos lleven más tiempo.
"Yo iría a Little White Chapel en Las Vegas, pero bueno, ella es italiana y eso no ocurrirá. Quiere una boda bonita y grande, así que ya te diré cuando tengamos una fecha", confesaba el actor en el programa 'Meredith Vieira Show' anteriormente.
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