El demandante, quien ha contratado a la abogada de famosos Gloria Allred para que lleve el caso, afirma que él era tan solo uno del grupo de paparazis que hacían fotos al cantante en el momento del incidente.
En el documento presentado se puede leer que "sin aviso ni provocación, Kanye atacó dando un puñetazo e intentando hacerse con la cámara de Ramos después de que este le preguntara '¿Podemos hablarte?'".
El paparazzi asegura que fue capaz de proteger su cámara pero que "cayó al suelo con tal fuerza que se hirió la cadera derecha, lo que le ha acarreado dolor y angustia emocional".
Fue llevado al hospital Marina del Rey en ambulancia para un chequeo médico y abandonó el centro con una contusión muscular, pero el Fiscal del Condado de Los Ángeles no presentó cargos contra Kanye al no haber habido una "herida significativa".
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Ramos contó a los reporteros en una rueda de prensa ofrecida que él solo estaba "tratando de hacer" su trabajo, según publica E! News.
"Hablo porque no quiero que lo que me pasó a mí vuelva a pasar a otra persona", añadió.
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El fotógrafo solicita compensación (no especificada) por agresión, asalto, negligencia e interferencia en el ejercicio de los derechos civiles.