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La polifacética Eva Longoria será una vez más la flamante anfitriona de la Global Gift Gala que se celebrará este 20 de julio en la localidad malagueña de Marbella, un evento para recaudar fondos en beneficio de numerosas organizaciones solidarias pero que, al mismo tiempo, está sirviendo a la conocida actriz para despejar su mente de los desagradables recuerdos que todavía acumula de su extinto matrimonio con el jugador de baloncesto Tony Parker, justo cuando ayer lunes se cumplían 7 años de una boda tan emotiva como posteriormente decepcionante.
Tanto es así, que la estrella televisiva ha preferido ignorar por completo los numerosos comentarios que han ido apareciendo en las redes sociales -amplificados por los medios de comunicación digitales- sobre algunos de los episodios más dramáticos que vivió la intérprete durante el período comprendido entre 2007 y 2010, hasta que finalmente decidió acudir a los tribunales para solicitar un divorcio que, aunque oficialmente se debía a sus "diferencias irreconciliables", en realidad estaba más relacionado con las continuas infidelidades del deportista.
Por el contrario, lejos de recrearse en el dolor generado por el desengaño amoroso más importante de su vida, la artista texana ha querido compartir con sus seguidores de Twitter el entusiasmo que le invade ante la idea de viajar en pocos días a su adorada España -tierra de sus ancestros- para reencontrarse con amigas como María Bravo, una de las organizadoras de la ceremonia, y para amadrinar no solo una exclusiva cena de gala con fines benéficos, sino también un esperado torneo de golf que reunirá a varias caras conocidas de la crónica social del país por una buena causa.
"El sábado 19 celebraremos el torneo [de golf] solidario con el que daremos el pistoletazo de salida a un fin de semana emocionante. Preparados ya para la Global Gift Gala de Marbella en su tercera edición", publicó la artista en su cuenta de la red social tras adjuntar un vídeo con algunos de los mejores momentos de la misma competición disputada el año pasado.
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Se desconoce si Eva Longoria llegará a dejar de lado su afición al baloncesto y a los San Antonio Spurs en los que juega su expareja para dedicar sus energías a mejorar sus habilidades como golfista, pero al menos ha puesto de manifiesto en los últimos meses que su idílica relación con el empresario José Bastón le ha alejado para siempre de la depresión que vivió tras su divorcio.
"Mi separación fue seguramente el período de mi vida en el que recibía más piropos, porque estaba muy delgada. Pero lo cierto es que no comía nada, estaba deprimida, muy triste. Mi dieta se limitaba a tomar un poco de café por las mañanas", explicaba la intérprete en el programa de televisión del famoso Doctor Oz.
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