Raúl termina cediendo a que la Fiscalía vaya hasta su hotel a tomarle su testimonio, pero aunque el coronel Alzate le ofrece protección del Ejército, él decide quedarse solo e intentar huir cuando es sorprendido por unos hombres que lo meten en el baúl de un carro.
Barón , a cargo de esa operación, decide involucrar a Manuel a quien también se lo llevan en el baúl de un automóvil sin saber cuál será su destino.