Santiago logro impresionar a los entrenadores con su voz desde la primera nota de su canción. Su tranquilidad sobre el escenario le abrió las puertas de los tres equipos del programa, pero él escogió a Goyo como su entrenadora.
A Santiago nada le queda grande, su sueño es entrar a La Voz Teens y demostrarle su talento a todo el país. Tiene un corazón noble, irradia felicidad y es un apasionado por el baloncesto.