Luego de encontrar evidencias de que J.J. tiene responsabilidad en la muerte de un hombre en la cárcel, además de otros delitos en su contra, el juez decide eliminar el acuerdo que había hecho con la Fiscalía y darle una condena definitiva de 30 años excarcelables y sin privilegios.
Jhon Jairo queda en shock, pues no concibe la idea de pasar el resto de su vida preso, por lo que en un momento de locura decide lanzar desde una ventana y cae sobre unas cajas que contienen archivos de la Fiscalía.