La rapera Iggy Azalea se ha convertido nuevamente en el blanco de la polémica por su reacción en pleno concierto en Brasil. La artista se encontraba cantando uno de sus exitosos temas cuando una de sus bailarinas cayó al suelo.
Al verla tirada en el piso, Azalea pidió por el micrófono que un médico subiera al escenario para atender a la joven… pero a los segundos continuó la canción como si nada pasara.
Lo que ella asegura que no sabía era que en realidad su bailarina estaba convulsionando y pronto llegaron los servicios de emergencia para asistirla, mientras el resto de su equipo de danza miraba atónita la escena.
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Las críticas contra la cantante no pararon, por lo que ella afirmó en sus redes sociales que pensó que se había caído o se había torcido un tobillo, por eso no dejó de cantar.
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