Antojos en el embarazo: descubre las sorprendentes razones por las que se producen

Es importante que en el embarazo las mujeres adopten hábitos alimenticios saludables, pues este factor es fundamental para el sano desarrollo y crecimiento del bebé. Llevar una dieta balanceada no consiste en reprimir los antojos y comer estrictamente productos ricos en nutrientes, lo ideal es encontrar un equilibrio y también tener en cuenta la frecuencia de consumo.

En el periodo de gestación las mamás necesitan las tres comidas básicas, es decir, desayuno, almuerzo y cena. Adicionalmente deben abrirle espacio a las meriendas, estas deben estar repartidas a lo largo del día, una puede ser en la mañana, otra en la tarde y la última en la noche, dependiendo de la rutina que se tenga establecida.

Normalmente las mujeres sienten antojos en el embarazo y eligen productos con alto porcentaje de azúcar o carbohidratos para saciarse. Aunque es una condición común, muy pocas personas saben por qué se presenta, por esoCaracol Televisión habló con la doctora Susana Martínez Galeano, ginecóloga, obstetra y especialista en medicina materno fetal, quien se refirió a algunas de las teorías que existen al rededor del asunto.

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Las ganas de comer determinados alimentos pueden producirse a partir de los cambios hormonales que experimentan las mujeres embarazadas, pero también por deficiencias nutricionales, por ejemplo, las personas que padecen anemia desarrollan un trastorno conocido como 'Pica', este hace que quieran consumir tierra, tiza o hielo.

También se cree que la salud mental está relacionada con los antojos en el embarazo. De acuerdo con la doctora Martínez, al ser consientes de su estado, algunas mamás entran en estado de ansiedad. La combinación de felicidad y preocupación hace que se sientan atraídas por ciertos alimentos.

Escucha con atención las recomendaciones de la profesional y toma nota, ya que te explicará detalladamente cómo debes estructurar los platos de comida y qué productos son indispensables en tu dieta. Sé responsable, recuerda que no solo está en juego tu salud, sino también la de tu bebé.