La madre de Carmelo espera con ansias que su hijo salga para que verse con su amor, Pedro Miguel Morales, quien entra por la ventana para no ser descubierto. Tienen un encuentro pasional, pero mientras están tomando una siesta Carmelo regresa a la casa.
Anabel saca corriendo al papá de Miguel, pero su hijo no es tonto ni ingenuo y presiente que algo está pasando, debido a la extraña actitud de su madre que se demora en abrirle la puerta. Sin pensarlo dos veces, Carmelo toma un arma cuando descubre que un hombre salió por una ventana.
Aunque no logra identificarlo, él le dispara y Pedro Miguel llega a donde su madre con el brazo herido.