Miranda Kerr parece haberse dado cuenta por fin de que es una modelo con un cuerpazo de infarto que merece la pena enseñar. La australiana dejó a un lado sus sosos conjuntos de madre trabajadora para apostar por una camiseta blanca -con sujetador de lencería incluido- que combinó con unos pantalones negros y un favorecedor recogido.
Actualizado: febrero 05, 2016 07:03 p. m.