El difunto actor Mickey Rooney -que falleció el pasado domingo debido a causas naturales derivadas de complicaciones en su diabetes- realizó su testamento el día 11 del pasado mes de marzo para dejar clara su última voluntad, en la que nombra a su hijastro, el actor Mark Aber, y a su mujer Charlene como los únicos beneficiarios de su patrimonio, valorado únicamente en 18 000 dólares (13 000 euros).
Según la información del diario USA Today, pese a haber comenzado su carrera antes incluso de cumplir un año, el actor aseguraba en vida que su fortuna se había dilapidado hace tiempo debido a sus excesos de juventud y a la mala administración financiera de otro de sus hijastros.
De acuerdo con su testamento, el intérprete deshereda a sus ocho hijos y a su actual exesposa Janice Rooney, con quien compartió 35 años de matrimonio. El actor consideraba que recibir los beneficios de su pensión y de su cotización en la Seguridad Social serían una compensación suficiente para su exmujer, y aseguraba que la situación económica de sus hijos era mucho más favorable que la suya propia, justificando de esta manera no haberles incluido en su última voluntad.
Pese a su avanzada edad, el abogado de Mickey ha asegurado que el antiguo niño travieso de Hollywood no tenía ninguna intención de retirarse del mundo del espectáculo, pues en el momento de su muerte aún se mostraba muy emocionado ante cualquier nuevo proyecto cinematográfico.
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El que fuera uno de los actores mejor pagados de la meca del cine durante la década de los 30 y 40, expuso claramente a su representante legal que no quería que sus familiares se ocupasen de sus últimos asuntos, dejando estos en manos del abogado.
Sin embargo, según la información del periódico New York Daily News, su exesposa Janice y su hijo Chris Aber -a quien Mickey denunció en 2011 por supuestos malos tratos- intentaron retirar los restos mortales del actor del tanatorio Forest Lawn de California, "en contra del deseo expreso del fallecido". En relación a ese tema, una audiencia ha sido fijada para el próximo viernes; hasta entonces el cuerpo del fallecido permanecerá en las mismas dependencias.
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Más allá de la polémica entre los familiares de Mickey, su abogado ha confirmado que los preparativos para el funeral del intérprete ya están en marcha, así como para un posible tributo público, y ha revelado que la voluntad de su cliente era ser enterrado en un cementerio de veteranos de guerra.