Muy bien, Lily Aldridge, ya nos ha quedado claro que eres modelo; a nosotros, a tus amigas y al tendero de la esquina que no se explicaría si no por qué ibas enseñando el sujetador por debajo de la blusa. Ahora, por favor, sácale partido a ese armario lleno de diseños de marca que sabemos que tienes y deja de vestirte con camisetas de papel de cebolla.
Lily Aldridge lleva su profesión escrita en la cara
Actualizado: febrero 05, 2016 06:49 PM
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