El hecho de haber dejado atrás la soltería para disfrutar de una apacible vida matrimonial junto a Kanye West parece haber afectado de lleno al criterio estético de Kim Kardashian, quien en vez de optar por las ajustadas prendas que exprimían al máximo el potencial de sus curvas, ahora se decanta por vestidos amplios, discretos y de corte clásico. Buena prueba de ello es este modelito que parece haber sido confeccionado bajo los cánones del siglo XVI, con un tejido al que solo le falla el estrambótico estampado.
Actualizado: febrero 05, 2016 07:09 p. m.