A pesar de tener una ajetreada agenda debido a su exitosa trayectoria cinematográfica, la actriz Kate Winslet -madre de Mia (13) y Joe (10), fruto de anteriores relaciones, y del pequeño Bear (10 meses) junto a su actual marido Ned Rocknroll- no considera que tenga más motivos que cualquier otra madre para quejarse de las dificultades que entraña conciliar su vida laboral y familiar, por lo que le indigna profundamente escuchar las quejas de algunas de sus compañeras de profesión sobre el tema.
"Últimamente hemos escuchado a muchas actrices quejarse de lo difícil que resulta conciliar su trabajo y el cuidado de su familia. Pero en el fondo no deberían decir algo así porque nosotras en concreto somos tremendamente afortunadas. Así que no está bien que lo hagan y punto. Siempre es un desafío, pero ¿no es así para todas las madres trabajadoras?", declaró a la revista Marie Claire.
Para la afamada actriz lo más complicado de dividir su tiempo entre su carrera y su vida doméstica es tener que "saltar" constantemente entre dos ámbitos tan distintos y en los que se esperan cosas tan diferentes de ella.
"Personalmente, lo más complicado para mí es que mi vida en casa difiere mucho de mi vida en el trabajo. No importa cuál de las dos sea más difícil, lo complicado es estar todo el rato saltando de una a otra. Ese salto emocional es más complicado que toda la logística y la organización que conlleva. Pero simplemente nos limitamos a hacerlo, y si lo hacemos es porque podemos", afirmó.
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