Tanto la actriz Halle Berry como Olivier Martinez desean separarse de manera amistosa por el bien de su hijo Maceo (2) después solicitar el divorcio tras dos años de matrimonio, por lo que recurrirán a mediadores que les ayuden a resolver de la mejor manera posible los parámetros de la custodia de su hijo.
"Hay cero amargura", cuenta una fuente a Us Weekly.
Sus intenciones de mantener una relación cordial no quedan solo en palabras puesto que Halle le ha entregado las llaves de su segunda casa en Benedict Canyon (Los Ángeles) al actor francés para que viva allí.
"Quieren que Maceo tenga una casa para estar con Olivier. Quieren hacer lo que sea mejor para su hijo", añade la fuente a la publicación.
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La estrella de Hollywood decidió poner fin a su matrimonio después de que Ronaldo Owens, un empleado del Aeropuerto Internacional de Los Ángeles, demandara a la pareja solicitando 5 millones de dólares en compensación por la agresión que sufrió a manos de Olivier el pasado mes de enero, cuando el actor le empujó con una silla infantil para impedir que fotografiara a su familia mientras recorrían las instalaciones aeroportuarias.
"Cuando supo lo de la denuncia, se hartó", explicó una fuente a People este abril.
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Otro de los obstáculos que se interpuso entre los dos actores fue la decisión de un juez de impedir que Halle se trasladara en 2012 a París con Olivier junto a su hija Nahla (7), fruto de su fallida relación con el modelo Gabriel Aubry, algo que decepcionó profundamente al intérprete francés.