Entre risas y algo de vergüenza, Andrea Guzmán, la actriz que interpreta a Yadira Pacheco en Pedro, el escamoso, reveló una divertida anécdota de los ‘osos’ más grandes de su infancia, al estrenar con todas las de la ley los patines que le llegaron de regalo en Navidad.Hay que decirlo, no todo tiene que ver con pilatunas en la vida de la bogotana, ya que, tal y como lo compartió en #UnaNavidadEscamosa, su familia ha conservado una tradición especial durante muchos años y sigue más viva cada vez.Se trata de una costumbre con osos, pero estos no son precisamente vergonzosos. Son unos de peluche que visten con motivos navideños y los ponen frente al árbol cada diciembre. Cada muñeco está asignado a un ser querido, por lo que, con el paso del tiempo, la familia ha crecido al igual que los osos.No te pierdas más contenidos navideños en nuestro especial Abrazando la NavidadPedro, el escamoso en 2024La aclamada serie, Pedro el escamoso, regresa con una segunda parte que inicia cuando Pedro decide, después de vivir 20 años en el extranjero, devolverse a su país con la intención de reencontrase con sus amigos, familiares y en especial con su hijo, pero se encuentra con una realidad completamente diferente. Todo esto lo obliga a inventar una serie de historias para ocultar su vida sacrificada, con la única intención de ganarse la admiración y el respeto de todos. Miguel Varoni será de nuevo el protagonista de Pedro, el escamoso.Las mentiras comienzan a caerse por su propio peso cuando debe buscar un trabajo de mensajero. En la parte sentimental, Pedro vuelve más enamoradizo que de costumbre, y sus viejos dilemas en el amor serán una constante.
El pesebre es una de las representaciones más importantes de la Navidad. Ya sea grande, pequeño, realista, pintado, con ovejas, con buey, con asno, con perros, gatos y hasta dinosaurios, lo importante es reunir a toda la familia alrededor del nacimiento del Niño Dios, como reza la fe católica; pero también a que demuestre su creatividad.No te pierdas más contenidos navideños en nuestro especial Abrazando la NavidadCuando de armar el pesebre se trata, la recursividad sale a flote. En ese momento se les da uso a las cajas viejas guardadas, al papel que envuelve la panela, al espejo partido para el lago de los patos y hasta al musgo del jardín para recrear el pasto.Te puede interesar: Prosperidad Escamosa: los actores y el ritual de los bolsillos llenos de lentejas en Año NuevoMejor aún, en palabras de Pedro Coral de San Pablo: "mis mompirris, pa' que lo reconozcan, el pesebre nacional tiene que ser lo más másimo de lo másimo: el tiranosaurio rex, la chiva, el peluche, la oveja arisca, el Tavera manso, todo es bienvenido en el pesebre made in Colombia, mis reyes".En #UnaNavidadEscamosa, varias fueron las hipótesis que plantearon los actores de Pedro, el escamoso cuando se cuestionaron: ¿por qué las ovejas del pesebre no se paran? Algunos aseguraron que se debe al cansancio de las diminutas figuras al estar dos meses de pie, otros culparon a sus gatos del fracaso de sus pesebres, mientras que los demás aprovecharon para rememorar lo importante que es la época navideña para los colombianos y cómo disfrutan de esta tradición.Pedro, el escamoso en 2024La aclamada serie, Pedro el escamoso, regresa con una segunda parte que inicia cuando Pedro decide, después de vivir 20 años en el extranjero, devolverse a su país con la intención de reencontrase con sus amigos, familiares y en especial con su hijo, pero se encuentra con una realidad completamente diferente. Todo esto lo obliga a inventar una serie de historias para ocultar su vida sacrificada, con la única intención de ganarse la admiración y el respeto de todos. Miguel Varoni será de nuevo el protagonista de Pedro, el escamoso.Las mentiras comienzan a caerse por su propio peso cuando debe buscar un trabajo de mensajero. En la parte sentimental, Pedro vuelve más enamoradizo que de costumbre, y sus viejos dilemas en el amor serán una constante.
La canción 'Mamá, ¿dónde están los juguetes?' cuenta la historia de un infante al que el Niño Dios no cumplió con sus regalos y es famosa por esta triste historia, pero también por la inolvidable voz de quien la interpreta. Esta canción fue todo un éxito en la Navidad de 1962 en la voz de Raquel Castaños, una cantante y actriz venezolana, quien recuerda con cierto disgusto esta experiencia. Aunque la canción ha sido tan famosa, nadie sabe quién hay detrás de ella en la actualidad. La mujer que la interpretó ya tiene alrededor de 60 años, pero su voz ha estado presente por muchas décadas, tiempo en el que ella ya le cogió cariño a esta pieza y expresa que le da orgullo que suene tanto en Colombia.Muchos años después, así luce en la actualidad la famosa voz de 'Mamá, ¿dónde están los juguetes?' interpretada por Raquel cuando solo tenía siete años.
Mientras se escucha el animado ritmo que caracteriza al villancico 'Campana sobre Campana', una dulce voz interpreta una de las canciones más reconocidas de la época decembrina, la cual transmite armonía, amor, unión y anuncia la llegada del Niño Jesús. Aunque es un villancico muy popular en distintos países, sus inicios y su autoría no están muy definidos, pues solo se ha documentado que su origen es andaluz (en la costa sur de España) y se creó desde principios del siglo XX.Mira también: Así luce en la actualidad la niña que cantó 'Mamá, ¿dónde están los juguetes?'Mientras la melodía transcurre, sus versos cuentan una historia, pues las campanas son un símbolo especial de la iglesia, ya que su sonido se relaciona con la divinidad y las creencias supersticiosas. Inicialmente, se anuncia el alumbramiento y con una metáfora expresa la alegría con el sonido de campanas. Luego, se narra la celebración por el parto de la Virgen María, ya que los pastores van a Belén a llevar "requesón, manteca y vino". Esta canción es una de las preferidas por los niños y adultos durante Navidad, pues se reúnen alrededor de ella ya sea para interpretarla durante las novenas, animar las festividades o compartir una cena. Además, ha sido adaptada a cientos de idiomas, lo que ha hecho que recorra el mundo entero con sus alegres melodías.
'Feliz Navidad' fue creada por el cantautor y guitarrista puertorriqueño José Feliciano en 1970. Esta pieza musical se ha convertido en todo un himno de buenos deseos para todos gracias a su estribillo en inglés "I wanna wish you a Merry Christmas from the bottom of my heart" el cual traduce"Te deseo desde el fondo de mi corazón una feliz Navidad".Mira también: Así luce en la actualidad la niña que cantó 'Mamá, ¿dónde están los juguetes?' Este famoso villancico es de los más conocidos de todos los tiempos y un clásico de la época decembrina en los Estados Unidos, Canadá y en todo el mundo de habla hispana. Por hacer parte de una de las 25 canciones navideñas más escuchadas, ha sido interpretada por muchos artistas a nivel mundial como Celine Dion, David Hasselhoff, Moby, El Vez, Jon Secada, Fenix TX, Home Grown, el grupo ska-punk Voodoo Glow Skulls y The Wiggles y Thalía.
Así como el "pirulín pin pon, pirulín pin pon" de Pedrito Coral se baila y se tararea en toda Colombia, el "tutaina tuturumaima, tutaina tuturumá" le ha dado la vuelta al mundo y ha acompañado las navidades año tras año sin perder vigencia a través del tiempo; pues ambos coinciden en que, aunque no sabemos ni qué significan, tienen un no sé qué muy pegajoso y que genera fácil recordación.Ya llegó diciembre con su alegría y, por supuesto, con su reconocida 'Tutaina', siendo esta una de las canciones decembrinas que se hace más familiar al oído de las personas, pues se ha mantenido presente a través de los años en cada Navidad y en cada novena. Mira también: 'Feliz Navidad', el villancico que lo ha interpretado hasta ThalíaA pesar de ser un tema tan famoso, su origen, su compositor y su nacionalidad no son conocidos hasta el momento. De este villancico solo se sabe que su mayor éxito fue grabado en el sello Sonolux teniendo como solista a Saida Ochoa y el respaldo del Coro del Instituto Venezolano de Ciegos, a mediados del siglo XX.Finalmente, solo se conoce el significado de la palabra más repetida en la canción: Tutaina, la cual quiere decir fiesta. Sin embargo, trayéndola al contexto de la pieza musical, es una pequeña celebración familiar navideña equivalente a la novena del Niño Dios, en la que se canta con amor y alegría porque acaba de llegar de los cielos el Mesías.Te puede interesar: ¿Por qué se casó Adonay? Esta es la verdad detrás de la famosa canción
"Noche de paz, noche de amor" son las primeras palabras en español de la famosa pieza navideña, frases que han llenado de esperanza a muchos países del mundo durante más de 200 años, pues este villancico se creó durante épocas de adversidades en Austria y ha seguido vigente, siendo una de las canciones más emblemáticas de la época decembrina.Los armoniosos versos que componen esta pieza fueron escritos por el sacerdote Joseph Mohr en 1816, para luego ser interpretada por su mismo autor, acompañado del maestro Franz Gruber en 1818, momento desde el cual viene marcando la historia navideña de miles de familias alrededor del mundo.No importa el idioma en el que se interprete o los años que pasen, este mensaje ha traspasado fronteras y épocas, para así unir a cientos de personas en unos versos de paz y amor cada diciembre con la melodía que nació de la guitarra que sonó por primera vez en un pequeño pueblo austriaco y hoy, dos siglos después, sigue encantando con su dulce acorde.
Aunque el famoso "pirulín pin pon, pirulín pin pon" de Pedro, el escamoso suene parecido al también sonado "Ro, po, po, pón", los dos son muy diferentes, pero perfectos para la misma época: Navidad. Uno para 'azotar baldosa' en la fiesta y el otro para celebrar las novenas de aguinaldos. "El camino que lleva a Belén… baja hasta el valle que la nieve cubrió…", son los reconocidos versos con los que inicia 'El Tamborilero' y de los que es inevitable no seguir con el famoso estribillo "Ro, po, po, pón", coro que se entona desde 1941, cuando la pianista Katherine Kennicott Davis transcribe un antiguo manuscrito checo al inglés. Mucho se ha hablado de su origen, sin embargo, aunque no es muy exacto, se ha posicionado en cientos de países alrededor del mundo, porque no importa el idioma en el que esté su letra, su ritmo se hace muy familiar para el oído de las personas.El villancico completa más de 220 versiones en siete idiomas, desde una interpretación al estilo 'crooner' del genial Frank Sinatra, hasta una sin modificaciones de Bob Dylan. Pero por supuesto, una de las más interesantes fue su traducción a la lengua de signos para que también las personas sordas puedan disfrutar de él. Finalmente, da lo mismo el idioma, pues al llegar al estribillo, todas las lenguas se convierten en una sola mientras suena el redoble, que convierte esta pieza navideña en una de las más famosas y preferidas por las familias en la época decembrina.
La tradición de usar calzones de color amarillo el 31 de diciembre para recibir el Año Nuevo, tiene tantos años como adeptos. Generación tras generación ha heredado el gusto por esta prenda que se vende como pan caliente en el comercio los días previos a la partida del año viejo.El color amarillo está ligado al sol, elemento que representa la eternidad y la energía vital del planeta. Además, en otras culturas representa el oro. Por eso, recurrir a la ropa íntima amarilla el último día del año se ha convertido en un llamado a la abundancia y a la prosperidad en todos sus sentidos, al amor, la pasión y a la buena suerte.Depende del tipo de calzón, podría matar pasiones y aportar sensualidad. O mejor, como diría Pedro Coral mirándose al espejo con cucos amarillos: “usted conmigo se sobró, mi viejo. Qué pinta, qué estampa, qué estilo. Sumercé lo que no me dio en plata, me lo dio en presencia”.Mira también: Prosperidad Escamosa: los actores y el ritual de los bolsillos llenos de lentejas en Año NuevoMucho se ha dicho sobre este amuleto. Dicen algunos que se deben poner antes de la media noche y al revés para que su efecto sea mayor, como la misma Andrea Guzmán lo hace. Después de los abrazos de Año Nuevo, hay que darles la vuelta para que queden al derecho. Además, la tradición asegura que podrían funcionar aún mejor si la prenda es regalada, aunque esto no es indispensable.Existen calzones amarillos de muchos tipos y para todos los gustos. Solo hay que procurar que prevalezca el color del oro y confiar en que surta el efecto deseado.¡Apúrenle, mis mompirris, que yo ya los tengo puestos y al revés!
El final de un año y el comienzo de otro es la oportunidad perfecta para dejar atrás todo lo malo y atraer lo bueno que se quiera. Por eso, cuando el deseo es viajar, la vuelta a la manzana con una maleta en Año Nuevo no puede faltar. Al menos, esa es la creencia en varios países de América Latina.La medianoche del 31 de diciembre es maratónica. Difícil entender cómo alcanza el tiempo para comerse 12 uvas, barrer la casa hacia afuera, meter papas debajo de la cama, abrazar a toda la familia, echar lentejas en los bolsillos, bañarse en champaña y hasta darle la vuelta a la manzana con una maleta; pero todo esfuerzo es necesario con tal de no dejar perder las costumbres navideñas y que no haya excusa para que las cosas salgan mal el próximo año.Te puede interesar: ¿Por qué las ovejas del pesebre no se paran? Actores de Pedro, el escamoso responden con humorComo buenos latinos, algunos de los actores de Pedro, el escamoso, desde Colombia hasta Argentina, han puesto en práctica este ritual y confían plenamente en que funciona para poder viajar. Cada uno lo hace a su modo y con lo que personalmente quiera atraer.Para Andrea Guzmán, el ritual de la maleta fue tan efectivo que tuvo que dejarlo de hacer para poder descansar de los viajes. A Javier Gómez, le gusta hacerlo con champaña a bordo para anticiparse a la intención de los viajes que quiere realizar. Mientras que Inés Oviedo prefiere atraer la abundancia y de ahí para adelante todo es bienvenido en su vida.
Se estila que, por cada campanazo en Año Nuevo, se debe comer una uva hasta completar 12, una detrás de la otra, y con ellas, pedir deseos para atraer la buena suerte y darle un empujón extra al año que apenas inicia.Los actores de Pedro, el escamoso no son ajenos a esta tradición. Aunque algunos la practican con devoción, otros prefieren acomodarla a su gusto.A una parte del elenco no le puede faltar las 12 uvas en Año Nuevo, ya sea hasta “atragantarse” o sumergidas en una copa de champaña. Los demás confiesan que pasan por alto la actividad, para dedicarse al "cardio", mejor dicho, a bailar hasta el amanecer o hasta que el Año Nuevo los sorprenda.
En #UnaNavidadEscamosa, la actriz Sandra Reyes, quien interpreta a Paula Dávila, también dio una mirada al pasado para recordar a su abuela, y con ella una pesada, pero ingeniosa broma que le hizo en su infancia, cuando la sorprendió con una empanada rellena de algodón.Sí, así es, una empanada de algodón, una inocentada blanda y desabrida para el paladar. Lo que se hereda no se hurta, y la actriz confesó que no se queda atrás con sus inocentadas cada 28 de diciembre, pues así sea pequeño, siempre le gusta pegar uno que otro susto.Otro actor muy pícaro y escamoso con las bromas y las travesuras en estas fechas es Juan Carlos Arango. Por eso, disfruta del Día de los Inocentes en compañía de sus niños. .
El 28 de diciembre, Día de los Santos Inocentes, tiene en realidad un trasfondo trágico relacionado con la matanza de niños menores de dos años nacidos en Belén. No obstante, su significado e intención se han transformado con el tiempo hasta convertirlo una fecha para hacer bromas y travesuras.Al igual que Inés Oviedo, el actor Javier Gómez tampoco se salvó de que un 28 de diciembre le dijeran "¡Inocente palomita que te dejaste engañar!", "caíste por inocente" o "que la inocencia te valga", pues le hicieron pasar un gran susto.Te puede interesar: "A pata boleada": la novena de aguinaldos más accidentada que ha vivido la actriz Martha Osorio“Mi rey, le falta cañaña, le falta malicia, le falta escama, si ve, por eso es que la doctora Paula prefiere a este pechito, un tipo de verdad, usted sabe, el más café con leche, mi mompirri”, como le diría Pedro Coral a César Luis en esta situación.Sin embargo, cuando de hacer inocentadas a los demás se trata, el actor argentino no se considera maldadoso, o más bien, como lo dijo en #UnaNavidadEscamosa con sus propias palabras: “no soy como César Luis Freydell”.