Al ver que Urrego no pudo convencer a la abogada Mónica Machado de tener algo con él, se aprovecha de la enfermera que lo atiende por una cortada en su mano.
Al día siguiente ella pone el denuncio y Clemente se entera de la situación, lo que complica el proceso de Urrego y podría alargar su condena al agregarle un cargo más por violación.
Por eso, antes de que pueda seguirse hundiendo Urrego le pide a sus hombres fuera de la cárcel que intenten convencer a la enfermera de quitar la denuncia.