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Mamá soltera gasta miles de dólares para ser la versión real de Barbie

La mujer, de 45 años, inició su adicción a las cirugías plásticas luego de un episodio de depresión por la pérdida de uno de sus hijos. Ahora está buscando a su Ken.

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Mamá soltera gasta miles de dólares para ser la versión real de Barbie
Mamá soltera gasta miles de dólares para ser la versión real de Barbie

Rachel Evans, una mujer del Suroeste de Londres, de 45 años, reveló ante la prensa que ha gastado más de 20 mil euros, cerca de 68 millones de pesos colombianos, en cirugías faciales para tener el aspecto de Barbie.

Su historia fue dada a conocer por el Daily Mail, en donde aseguró que ha modificado su imagen haciendo una marcación de sus pómulos, corregido su quijada e inyectado Botox en su frente para verse más feliz.

Además, Evans se operó los senos pasando de una talla 32AA a 32D y luego a 38 gracias a los ejercicios que practica en el gimnasio.

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Su adicción a las cirugías plásticas empezó cuando sufrió de depresión debido a la pérdida de uno de sus hijos gemelos en el parto y la terminación de su relación.

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“Mi otro hijo, Rees, solo sobrevivió después de que lo llevaron a cuidados intensivos y le hicieron una transfusión de sangre en la primera semana de su vida. Después de esa traumática experiencia estaba devastada y eso se notaba”, aseguró.

Empezó a cambiar su aspecto y se cortó su larga melena negra para poder pintársela de rubio platino. Pronto la gente empezó a llamarla Barbie por su delgadez y desde ese momento supo que quería lucir como la muñeca.

“Quería tener ese ‘aspecto congelado’ porque no quería que mi cara mostrara tristeza. Incluso hice que las comisuras de mis labios vayan hacia arriba para no verme infeliz”, afirmó.

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Rachel Evans contó al mencionado medio que estaba buscando a su propio Ken y que prefería hombres entre los 20 años porque los de su edad no la valoraban.

“Mi alter ego de Barbie se siente completamente auténtico para mí. Algunas personas piensan que porque me veo falsa también soy una persona falsa, pero mis amigos saben que tengo cerebro, así que no me molesta ni un poco”, puntualizó. 

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