Lo bueno del vestuario de Taylor Swift es que resulta tan adecuado para el Nueva York de los años cincuenta como para sus correteos actuales por el East Village. Una vez más, la cantante era la imagen de la esposa perfecta de los anuncios antiguos de Coca Cola, con su vestido verde menta de lunares blancos y su flequillo perfectamente peinado.
Actualizado: febrero 05, 2016 06:59 p. m.