La periodista Sara Carbonero no podría haber empezado el año con mejor pie, ya que tras disfrutar de una agradable e íntima Nochevieja en su casa de Oporto junto a su pareja, Iker Casillas , y sus hijos Martín y Lucas, ahora ha querido compartir con todos los lectores de su blog personal algunos de los retos que se ha planteado para conseguir que 2017 sea un año inolvidable y lleno de satisfacciones a todos los niveles.
De entre todos ellos, sin duda destaca su objetivo de depender menos del móvil en su vida diaria, como en más de una ocasión le ha recordado su avispado primogénito, aunque tampoco se olvida de otras metas algo más comunes, como la necesidad de dedicar más tiempo a la actividad física o planear con mayor antelación sus obligaciones del día a día.
Ver: Esto dice Sara Carbonero, la esposa de Iker Casillas, de ser madre de nuevo
"Mi propósito más firme para este nuevo año es usar menos el móvil. Sí, y este pienso cumplirlo porque a veces no me aguanto ni yo pero la mayoría de las veces el que se enfada y con razón es Martín. No sé si a alguna mamá os ha pasado eso de estar jugando con vuestro hijo, parar a mirar un segundo el teléfono y que tu niño te diga con esa vocecita y esa cara de pena: "Mamá, deja el móvil...". A mí me ha pasado y soy consciente de que estoy un poco enganchada. Pero esto va a cambiar", reveló antes de explicar por qué necesita llevar un estilo de vida más saludable en todos los aspectos.
Publicidad
"Yo este año me he propuesto hacer las cosas con menos prisa. Apurar menos, pero desde que tengo los dos peques se ha convertido en una guerra imposible. No hay manera de que me sobre tiempo, siempre voy a la carrera y eso me genera estrés, agobio y malestar. Otra cosa que me gustaría mejorar es el tema del ejercicio físico. Aquí tengo bastante fácil cumplir con el propósito porque es difícil ir a peor. No hago apenas nada. Justo antes de quedarme embarazada de Lucas había retomado el pilates. Lo hacía tres veces a la semana y me sentía bien. Después paré durante el embarazo y me fijé como fecha de la vuelta cuando Lucas tuviera cuatro meses. Ya tiene siete", se sinceró en la misma publicación.
A pesar de no haber podido estar en su España natal durante el último día de 2016 y los primeros del año que acaba de comenzar, la periodista se siente profundamente afortunada de haber podido compartir unas fechas tan especiales junto a su marido y sus retoños, así como con todos los amigos que han ido haciendo en Portugal desde que ambos trasladaran su residencia al país vecino hace casi dos años.
Publicidad
"Cuando nos despertamos con un sol radiante el último día del año preguntamos a Martín qué le apetecía hacer para despedir el 2016. Lo tuvo claro: ir a tirar piedras a la playa. Nos pareció una buena idea y nos fuimos a comer a nuestro restaurante preferido en la Praia da Luz. Después de la comida, dimos un paseo largo, hacía una temperatura de primavera. Parecía increíble que fuera 31 de diciembre. Después nos sentamos en la orilla y tiramos unas piedras al mar", comienza a relatar Sara en su espacio personal.
"Cuando empezó a anochecer nos fuimos a casa a preparar la cena que resultó divertidísima. Tomamos las uvas dos veces, una con el horario español y otra con el portugués. Brindamos con champán y los niños con "Champín" (una bebida que he descubierto este año que no lleva alcohol y sabe a frutas del bosque). Y cuando terminó el último programa de actuaciones musicales nos fuimos a dormir", reza el último extracto de la historia que narra la apacible entrada de los Casillas-Carbonero en el nuevo año.
Por: Bang Showbiz