A pesar de llevar más de un año juntos, el cantante Lenny Kravitz (50) y la modelo argentina Lucila Godoy (25) habían conseguido mantener hasta el momento en el más estricto secreto los detalles de su romance, que habría comenzado hace diez años durante una de las giras del roquero por el país andino, según se hace eco ahora la prensa argentina.
Al parecer, Lenny habría caído rendido antes los encantos de la joven, que en aquel momento tenía apenas 15 años, al cruzarse por casualidad con ella en la calle, por lo que no habría dudado en abordarla empleando una frase tan original como: "Es como si nos conociéramos de otra vida".
"Ella antes era muy joven y tenía miedo a la exposición [mediática], a lo que implicaba el hecho de tener que explicar una relación así", aseguró una fuente cercana a la modelo a la revista argentina Gente.
Casi una década después de ese primer encuentro, la amistad inicial que se forjó entre Lenny y Lucila se ha convertido en un romance tan sólido que, según las últimas especulaciones, el cantante ya le habría pedido que se mude con él a Los Ángeles, donde la argentina le visita con asiduidad.
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"Es tan lindo estar juntos que nunca quise que nada se contamine. Es increíble que después de diez años nuestro vínculo esté intacto... ", asegura Lucila a sus más allegados según el informante anterior.
Por su parte, y a pesar del ilusionante noviazgo que mantiene con la argentina, Lenny aún conserva un estrecho vínculo con su exmujer Lisa Bonet -madre de su hija Zoe (26)- que también se extiende al actual marido de esta, el actor Jason Momoa.
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"Mi padre adora a mi hermano y mi hermana [fruto de la relación de Lisa y Jason] y mantiene una relación estrecha con ellos. Es muy bonito. Siempre y cuando podamos estar todos juntos en una habitación y querernos, no habrá nada raro en ello", aseguraba Zoe a la revista Ocean Drive.