La particular biblia de la moda de Kim Kardashian reza que los vestidos de noche deben ser ajustados y con escote, y los atuendos de día, distintas combinaciones de vaqueros pitillo y camisetas básicas. Ciñéndose a esta máxima, la estrella televisiva acudió a una comida en Beverly Hills (Los Ángeles) enfundada en unos ajustados pantalones y una camiseta de color claro. Aunque se trataba de uno de sus looks característicos, su figura curvilínea sale ganando cuando elige estas mismas prendas pero en colores más oscuros, que la estilizan visualmente.
Actualizado: febrero 05, 2016 07:08 p. m.