Recordemos que él sufrió un accidente cardiovascular el 7 de febrero de 2015 cuando estaba en una gira (ya como solista).
El concierto del pasado fin de semana fue muy emotivo. La gente sabe perfectamente que no es la voz de antes, es un Jorge González que, a pesar de estar en una silla con la inmovilidad de su brazo izquierdo, mostró su grandeza.
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Y luego de una hora de cantar junto a sus amigos (otros cantantes chilenos) cerró el concierto con el himno de muchas generaciones: el baile de los que sobran.
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