Entre su peinado con coleta y su pantalon al más puro estilo chándal de domingo, queda claro que puedes sacar a Jennifer del Bronx, pero nunca podrás sacar el Bronx de Jennifer. Una vez aceptada esta realidad, lo único que queda por hacer es llevarlo con la misma dignidad que la cantante.
Actualizado: febrero 05, 2016 06:50 p. m.