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Enfermera se encuentra con su hermana perdida hace 50 años al atenderla por COVID-19

Al leer es listado de los pacientes, Bev Boro se llevó la sorpresa de ver el nombre de su hermana mayor. Esta es la historia de dos hermanas a las que el COVID-19 las reunió después de años.

Hermanas Doris y Bev
Las hermanas Doris Crippen y Bev Boro se reunieron después de más de 50 años
Foto: Daniel Johnson/Methodist Health System

Doris Crippen, de 73 años, fue diagnosticado con COVID-19 luego de que su hijo la encontrara tendida en el piso y la llevará a urgencias, en la ciudad de Omaha, en el estado de Nebraska, EE. UU. ahí, tras una fractura en su brazo, también su prueba salió positiva y supo que lo que tenía no era una simple gripa como creía.

La mujer fue hospitalizada y luego de un mes su prueba salió negativa, por lo que fue enviada a Dunklau Gardens, un centro de rehabilitación y hogar de ancianos en Fremont, Nebraska, asociado con Methodist Fremont Health, según información del The Washington Post .

Allí trabaja Bev Boro, de 53 años, quien es enfermera y descubrió en los papeles de sus nuevos pacientes un nombre que le pareció muy familiar. “Dios mío, debe ser ella”, pensó en ese momento.

Tal como lo imaginó, quien había llegado a su lugar de trabajo era Doris Crippen, su hermana mayor y a la que no veía hace más de 50 años, pues estas mujeres comparten el mismo padre, pero son de diferente madre. Y aunque ambas crecieron en Nebraska y pasaron años buscándose, nunca tuvieron suerte hasta ahora.

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Doris aseguró al diario que sabía que Crippen tenía problemas de audición, así que trajo una pequeña pizarra en la que escribió el nombre de su padre, Wendall Huffman. La pista para que su hermana mayor afirmara que él era su padre y pudieran abrazarse efusivamente tras su reencuentro, en el que no faltaron las lágrimas.

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