Por lo general, en la tarde y en la noche se acumula el cansancio del día y más difícil tomar la decisión de hacer ejercicio. En la mañana se tiene toda la energía y disposición para hacerlo, la dosis diaria de deporte se terminará antes de lo pensado.
El ejercicio tiene innumerables beneficios para la salud y el estado físico, la constancia es imprescindible para ver resultados en el cuerpo y la resistencia.
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Hacer deporte en la mañana, por lo general, implica que se dormirá más temprano y descansará mejor.
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Por último, el ejercicio matutino fortalece la mente y el cuerpo, ya que aumenta la capacidad de tolerar obstáculos conforme se va ejercitando.