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El actor Jim Carrey se enfrenta a una demanda interpuesta por Mark Burton, exmarido de su fallecida novia Cathriona White -que se quitó la vida en septiembre de 2015-, acusándole de utilizar "sus supuestos problemas mentales" como excusa para, a través de su estatus de celebridad, obtener medicamentos altamente adictivos bajo el nombre falso de Arthur King.
Los documentos presentados junto a la demanda por Burton, que estuvo casado brevemente con la joven antes de que esta retomara su relación sentimental con Jim Carrey en mayo de 2015, afirman que el veterano intérprete facilitó dichos medicamentos a Cathriona, desencadenando un final "terrible pero previsible".
Ante estas acusaciones, la estrella de Hollywood no ha tardado en salir al paso de la polémica para tachar de "desalmado" al exmarido de su pareja -que no había formalizado su divorcio antes de su muerte- y asegurar que defenderá su honor en los juzgados.
"Qué vergüenza. Para mí, lo más fácil sería encerrarme en una habitación con el abogado de este hombre y hacer que todo eso desapareciera, pero hay momentos en la vida en los que tienes que plantar cara y defender tu honor frente a este mundo malvado. No voy tolerar este intento desvergonzado de extorsionarme a mí y al recuerdo de la mujer que amaba", afirma ahora en un comunicado público el artista, que en el momento del suicidio de Cathriona había vuelto a concluir su relación sentimental.
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Jim Carrey también ha querido aclarar que la joven ya sufría problemas de depresión antes de que ambos se conocieran hace cuatro años en un set de rodaje.
"Los problemas de Cat habían surgido mucho antes de que nos conociéramos, y el triste desenlace con el que acabó todo escapaba a nuestro control. Espero que algún día no muy lejano la gente deje de intentar sacar tajada de su muerte y le permita descansar en paz".
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Por: Bang Showbiz
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