A diferencia de la dulzura que suele proyectar cuando opta por los tonos pastel en su vestimenta, la cantante Taylor Swift se esforzó en esta ocasión por sacar su lado más exótico durante un paseo matutino por las calles de Nueva York. La artista se convirtió en el centro de todas las miradas gracias a un vestido de corte tradicional pero plagado de saturados colores y un sinfín de flores, perfectamente combinado con un bolso verde y el intenso rojo de sus labios.
Actualizado: febrero 05, 2016 07:06 p. m.