La cantante Rita Ora ha tenido el bonito detalle de entregarle las llaves de su casa de Londres -valorada en 1.3 millones de libras- a sus padres, Vera y Besnik, después de darse cuenta de que ella apenas tenía tiempo para disfrutar de la mansión de seis habitaciones.
"Creo que en el fondo he acabado regalándoles la casa a mis padres. Ellos la necesitaban más de yo. En el fondo nunca estoy en un sitio demasiado tiempo. Así que ahora vuelvo a empezar de cero, pero al menos mis padres tienen un hogar", explicó la intérprete a Free Radio.
El bonito gesto de Rita servirá sin duda para compensar a sus padres, al menos en parte, por los quebraderos de cabeza que les dio durante su rebelde adolescencia en el oeste de Londres, donde frecuentaba fiestas y discotecas sin que Vera y Besnik supieran dónde estaba.
"Me rajaba las camisetas, era muy punk y no muy limpia. Y llevaba el pelo rubio, las cejas muy oscuras, pintalabios rojo y un montón de anillos malos que me ponían los dedos verdes. Y no solía oler muy bien... Pero mis amigos y yo éramos muy rebeldes. Siento que viví mucho cuando no debería haberlo hecho", contaba Rita a la revista Marie Claire.
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