La presencia de Cara Delevingne en la gala de los premios GQ británicos se puede describir con una palabra: espectacular. No se puede sacar un solo defecto al vestido de encaje que escogió la modelo, ni a su peinado de ondas, ni al color burdeos que escogió para los labios. Cara, esta vez sí, iba perfecta.
Actualizado: febrero 05, 2016 06:51 p. m.